Yo no estoy en facebook, ¿Y Qué?

¡Son sorprendentes las modas cómo funcionan!. Hace un año nadie sabía lo que es el fenómeno FACEBOOK, y ahora voy a una cena de veinticinco personas y se hace la pregunta “¿Qué levante la mano quien está en facebook? Y sólo dos personas no lo hicimos y además nos miraron como bichos raros. A mitad de la cena, una de las personas dijo tenía su nueva ecografía (está embarazada), yo le comenté que quería verla, y en broma (¡o no!) me dijo que sólo lo verían quien están en facebook.

¿Qué es faceboook?
Para los que todavía no les haya llegado la información (que hoy en día ya es extraño, ya que hasta los políticos se han apuntado a la moda) os diré que es un lugar en internet donde está interconectada la gente (llamado REDES SOCIALES). Cualquier persona que tenga una cuenta de correo puede participar, donde pones tus datos personales, tus hobbies, fotos y puedes añadir amigos o que te añadan y estos o tú puedes ver el perfil de otra persona, sus fotos, crear conversaciones…. También puedes buscar amigos que se quedaron por el camino (compañeros de la infancia, de un lugar de vacaciones…). Hay una sección que se llama MURO que la gente te puede escribir cosas, y también es un lugar que puedes colgar eventos y que todo el mundo los vea. La facilidad de manejo hace que el número de usuarios cada vez sea mayor.

A veces es difícil luchar contra la corriente, pero voy a plantear algunos puntos que hace que yo siga firme en no darme de alta y si tu quieres hacerlo como mínimo que lo hagas desde la reflexión, teniendo en cuenta los pros y los contras.

Por un lado, soy una persona que me gusta que mi vida la sepa quien yo quiero, me gusta mi punto de privacidad. Por cierto se ha escuchado que en selección de personal recurren a buscar tu perfil en facebook para saber más cosas que no has dicho en la entrevista (que puede jugar en tu contra). También la justicia utiliza este método para encontrar a una persona.

Por otro lado, yo creo que la vida va pasando y se quedan muchos amigos, conocidos en el camino, y no es que haya pasado nada malo en la relación, simplemente que nos encontramos bifurcaciones y se tuvo que elegir. No creo que sea necesario intentar mantener e intentar conservar relaciones que se enfriaron hace 25 años, o todas las relaciones que he creado en algún momento de mi vida. Aquellas amistades que me han interesado las he continuado cuidando para que sigamos caminando juntos. Y si por casualidad encuentro a alguien de mi pasado, me alegro por el encuentro, pero quizá no fuerzo la situación. En más de una ocasión me he encontrado compañeras de la infancia y no sabía qué decir, éramos seres extraños, con vidas muy diferentes.

Creo también que es un lugar que se potencia el cotilleo, el morbo hacia la vida de otras personas. He escuchado conversaciones en las que se decía (por ejemplo) “he encontrado por casualidad a Marta (está claro que el nombre me lo he inventado) , la expareja de Joan. Tendrías que ver cómo ha cambiado, tiene unas fotos donde…., y además está con otro chico más gordo….. y ha tendido un hijo….“ Automáticamente el resto del grupo se lanza contra el ordenador para poder ver esas fotos.

¡Como es de cajón¡ La gente sólo muestra su parte divertida, sus viajes, su parte perfecta de su vida imperfecta. No muestra sus debilidades, sus miedos, sus problemas, sus duelos. Pero qué pasa si tú estás viviendo un momento en el que estás sufriendo, si entras a ver la vida de estas otras personas tu sensación de infeliz, de bicho raro y único se acentúa y la frustración y dolor pueden aumentar.

Otro aspecto que me gustaría destacar, es nuestra necesidad como seres humanos de compararnos siempre con los otros (soy más pequeño, más rico, más inteligente o … soy más infeliz, menos gracioso…) . Y no creo que aquí sea una excepción. Tu vida y la de los demás están en la red para que busques los parecidos y las diferencias que tienes con las otras personas. El resultado puede gustarte o no.

Tenemos miedo a quedarnos aislados, a parecer diferentes, a que los demás piensen de nosotros. Y esta red social puede ayudar o no a aumentar tus miedos. En este lugar puedes ver la cantidad de amigos que tiene una persona o los pocos amigos que le han invitado a serlo. Puedes quedarte enganchado con el pensamiento de “por qué a mí no me han invitado casi amigos a entrar en su grupo”, o “JO, si que tiene amigos Luis y eso que es un imbécil…” Y si envías una invitación a alguien y te rechaza” ¿Cómo te puedes sentir? Y si alguien que no te cae bien te envía una invitación de amistad. ¿Estás obligado a aceptarlo, porqué “¿Qué pensará?

No puedo negar que seguro que tendrá muchos beneficios y en un futuro quizá se mejoren sus puntos débiles, pero con este escrito quería hacer explicito que no estás obligado a apuntarte a las modas, simplemente por eso, porque es una moda. Y digo, que soy libre de elegir y por ahora no me busques en FACEBOOK. NO estoy dada de alta. ¿Y qué?